Ambiente
Recuérdalo:
El vidrio es un material ÚNICO,
capaz de ser totalmente reciclado
una y otra y otra y otra vez.
Por ser un material permanente, sus propiedades físico-químicas no cambian sin importar la cantidad de ocasiones en las que el vidrio se recicle. Además su reciclaje se trata de un proceso de fundición simple, por lo que es extraordinariamente sencillo. Por lo que, cuando hablamos de vidrio hablamos de un verdadero reciclaje de botella a botella.
Los envases de vidrio son los únicos en Centroamérica que se reciclan de forma local en el mismo lugar en el que se fabrican.
Otros tipos de envases requieren procesarse fuera de la región, demandando costos extra en transporte y energía, incrementando su huella.
Debido a que el vidrio puede ser reciclado infinitas veces, hacer nuevas botellas utilizando vidrio recuperado, disminuye la cantidad de materia prima y energía necesarias para su producción. Esto le permite disminuir su huella de carbono de forma muy importante.
El vidrio es un material muy robusto por lo que le permite ser reutilizado en múltiples ocasiones.
Las botellas retornables son envases especialmente diseñados para ser reutilizados. Estos envases son recogidos, lavados, desinfectados y vueltos a llenar por las empresas embotelladoras una y otra vez.
¡Esto se realiza en promedio 40 veces en Centroamérica!
Este es un ciclo sin fin de beneficios que al no tener que producirse más envases, se evita el consumo de materias primas, se disminuye ostensiblemente el uso de combustible y la generación de desechos.
El vidrio retornable es sumamente resistente. Con un manejo adecuado la posibilidad de que se quiebre es mínima.
Y, si se quiebra, se recicla y se obtiene otra botella nueva lista para un nuevo ciclo virtuoso de 40 rellenados.
El vidrio retornable posee una huella de carbono muy inferior, si se le compara con otros.
El ciclo de vida total de los empaques, bien sea vidrio, plástico, aluminio o papel, incluye la extracción de la materia prima y su traslado, su producción, transporte y el reciclado o desecho final de el mismo materiales de empaque.
Debido a que el vidrio puede ser reutilizado en tantas ocasiones, su huella de carbono disminuye con cada rellenado sucesivo hasta alcanzar solo un 5% de la huella de carbono de cualquier envase desechable, con solamente 20 reutilizaciones.
Esto convierte al envase de vidrio retornable en el envase más sostenible y amigable con el medio ambiente.
Así que si quieres disfrutar de tu bebida favorita y al mismo tiempo cuidar del planeta: ¡Elije vidrio retornable!